Lucia Marrodan es una joven santiagueña de 18 años que actualmente vive en Portugal, país europeo en el que formó gran parte de su vida y carrera.
Su gran pasión, el Ballet. En sus recuerdos, este gran amor le nació a los 5 años de edad cuando veía el ejemplo de su hermana mayor, quien practicaba la disciplina.
“Le rogué a mis padres que me dejaran practicar. Una vez que estuvimos en la academia donde inicie, la profesora les dijo que no podía ingresar por el límite de edad. Fue el primer rechazo de ‘audición’ que sentí”, rememoró entre risas.
Recién a los ocho años tomó coraje y volvió a intentar en la misma academia. Lo que Lucia no sabía, es que eso definiría su vida por completo. Comenzó ballet como un hobby, pocos días a la semana y sin mucha atención.
La joven viene de una familia de deportistas, por lo que también practicaba natación y Taekwondo. En la última, era llamada una ‘niña prodigio’.
En el año 2014, ella con diez años y a dos de haber empezado su periplo en el ballet, se dio cuenta que era lo que más amaba y no se imaginaba fuera de un escenario.
“Me acuerdo de sentarme en la cama y decirle a mi mamá y a mi madrina Yo quiero ser bailarina”- recordó- “No me veo haciendo otra cosa”
Abandonó los deportes que practicaba para abocarse sólo al baile. En la entrevista recordó a su padre, gran deportista santiagueño, llorando cuando se enteró que dejaba Taekwondo.
La oportunidad de irse:
En 2016, ella con 12 años, recibió una beca en Nueva York (Estados Unidos) para realizar un curso intensivo de verano. Mientras transitaba esa experiencia, Lucia conoció a su actual profesora de baile, quien le ofreció un lugar en su conservatorio de ballet en Portugal. Ese mismo año tomó la decisión de irse.
La joven santiagueña a esa corta edad, sin saber absolutamente nada del idioma, viajó 10,323 km lejos de su familia y amada provincia, para dedicarse a sus sueños.
Hoy, a 5 años de esa decisión, Lucia vive una feliz vida en Leiria, Portugal, mientras cumple sus sueños.
Faltan pocos días para que se gradue del secundario, y en sus planes el ballet es lo primordial. Su intención es audicionar para la Compañía Nacional de Ballet de Portugal y quedarse 2 años más.
Contó a SantiagodelEstero.Net que extraña muchísimo la cultura santiagueña, a su familia y un buen lomito de la provincia.
Santiago del Estero es su provincia natal, y la ama tanto que una de sus metas está dedicado a engrandecer el arte y brindar oportunidades a la provincia.
“Mi sueño es fundar una academia de ballet en Santiago del Estero que le dé la posibilidad a niños y niñas de formar una carrera artística, sin tener que irse al exterior para lograrlo”, expresó la bailarina.
Lucia dejó un especial mensaje para los santiagueños y santiagueñas que se encuentran en una etapa de incertidumbre “Es muy difícil hacer lo que uno ama, eso no lo niego. Pero si tienes la oportunidad, animate, no pierdes nada. Lo máximo que se puede recibir en un no”